CAMILA COUVE ESTAMPAS DE NIÑA
Como Experimental Lounge, queremos anunciar que Juan Orellana y Jerko Julio, ambos de @loslibrosdespuesdelapeste se unen a nosotros para reseñar algunos libros de autores nacionales. Hoy nos hablan de “Estampas de niña” de Camila Couve Carrasco. (Si quieren leer la reseña completa pueden ir a la cuenta @loslibrosdespuesdelapeste )
El debut literario que menos esperaba, de una de las escritoras que más ha dejado en alto la narrativa de la niñez, para mi hasta ahora es Camila Couve Carrasco.
El debut literario que menos esperaba, de una de las escritoras que más ha dejado en alto la narrativa de la niñez, para mi hasta ahora es Camila Couve Carrasco.
El libro del que hablamos es “Estampas de niña”, señala un retrato biográfico necesario solo desde el sentimiento personal de una mujer mayor que retrata a través de textos empequeñecidos la relación parental y fraternal. Su familia como el lado del cariño y del tormento memorioso de la infantil vida escolar, familiar y de desarrollo en general.
El libro se encuentra en el plano de la no-ficción, con un estilo que provoca y ejerce un camino hacia lo narrativo. Invoca una figura biográfica a través de un desenvolvimiento, y un desdoblamiento. Lo que queremos decir con esto es que ella es una escritora viéndose a sí misma sin escapar de lo narrativo, no puede sino escribir ficción de sí misma, ¿No? Este es un conflicto ético, estético, moral, epistémico, ontológico incluso, de la narración autobiográfica.
El mensaje que quiere dar la autora con este libro es algo mucho más humilde y bajado de humos que lo que señalamos antes. Señala el mismo concepto de “Estampa”, señalando que es la copia de algo pictórico e ilustrativo. La copia de una nueva ficción, la de ella misma. Su vida como ficción de la ficción. El uso del concepto Estampa tampoco es inocente, ya que nos señala el peso del arte en su propia vida. El acercamiento de la ilustración maternal y de la pintura paterna en una sola palabra será dada al lector de una manera postmoderna. Los 67 textos, a los que la misma autora los señala como estampa, como un ejercicio de pintura escrita, como una descripción pictórica, como una fuerza pulsional heredada y fraternal, serán los que hablarán más de sus padres, que de ella misma.
Autor: Juan Orellana;
Corrección y edición: Jerko Julio
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