LA VIOLENTA NIEBLA, INSTANCIAS iNEXISTENTES
Por Gonzalo Vilo
En una escena saturada de fórmulas repetidas y producciones previsibles, La Violenta Niebla se alza —o más bien se disuelve y reaparece— como una rareza ineludible. Su segundo EP liberado el 2024, titulado "Instancias Inexistentes", es una experiencia sensorial más que un simple lanzamiento musical. Grabado en los Estudios Bajo el Chañar (@bajoelchanar7015) y masterizado en Canción (5), el trabajo respira autenticidad, riesgo y una profunda angustia creativa.
Desde la primera escucha, se percibe que este no es un disco para el consumo fácil. Con baterías marcadas por la intensidad de Tomás Alfaro (@wakalamusic) y líneas de bajo profundas y casi subterráneas en las canciones 2 a 4, la atmósfera general es la de un trance emocional contenido al borde del colapso. La voz —a veces al borde del grito, otras, susurrando como si confesara secretos— transmite desesperación y emoción con una crudeza que rasga.
Pero lo más interesante es que este EP no es solo un conjunto de canciones. Es un fragmento más del universo que Gino Vitali comenzó a construir en 2022 con la creación de La Violenta Niebla: un proyecto artístico multiforme que no se limita a la música, sino que coquetea con los libros, las series y otras formas del arte experimental. En ese contexto, Instancias Inexistentes actúa como un capítulo oscuro e hipnótico de una historia mayor, una obra en expansión constante.
Las imágenes que acompañan el EP, generadas vía Artbreeder, no son meros adornos, sino extensiones visuales de ese mismo mundo sonoro nebuloso, donde lo real y lo imaginario se cruzan sin pedir permiso.
Con este segundo EP, que sigue a Retratos Ajenos (2023), La Violenta Niebla reafirma su intención de convertirse en un bastión del arte experimental nacional. Y aunque ya se murmura sobre un nuevo disco en el horizonte, Instancias Inexistentes es, por ahora, un refugio perfecto para quienes buscan algo más que música: una voz que incomoda, que emociona y que —por suerte— se rehúsa a encajar.
Disponible en todas las plataformas. Escúchalo con los ojos cerrados y el alma abierta.
Desde la primera escucha, se percibe que este no es un disco para el consumo fácil. Con baterías marcadas por la intensidad de Tomás Alfaro (@wakalamusic) y líneas de bajo profundas y casi subterráneas en las canciones 2 a 4, la atmósfera general es la de un trance emocional contenido al borde del colapso. La voz —a veces al borde del grito, otras, susurrando como si confesara secretos— transmite desesperación y emoción con una crudeza que rasga.
Pero lo más interesante es que este EP no es solo un conjunto de canciones. Es un fragmento más del universo que Gino Vitali comenzó a construir en 2022 con la creación de La Violenta Niebla: un proyecto artístico multiforme que no se limita a la música, sino que coquetea con los libros, las series y otras formas del arte experimental. En ese contexto, Instancias Inexistentes actúa como un capítulo oscuro e hipnótico de una historia mayor, una obra en expansión constante.
Las imágenes que acompañan el EP, generadas vía Artbreeder, no son meros adornos, sino extensiones visuales de ese mismo mundo sonoro nebuloso, donde lo real y lo imaginario se cruzan sin pedir permiso.
Con este segundo EP, que sigue a Retratos Ajenos (2023), La Violenta Niebla reafirma su intención de convertirse en un bastión del arte experimental nacional. Y aunque ya se murmura sobre un nuevo disco en el horizonte, Instancias Inexistentes es, por ahora, un refugio perfecto para quienes buscan algo más que música: una voz que incomoda, que emociona y que —por suerte— se rehúsa a encajar.
Disponible en todas las plataformas. Escúchalo con los ojos cerrados y el alma abierta.
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